San Juan de la Cruz, p.y d. (MO). Blanco.
Leccionario Santoral: 1Cor 2, 1-10; Sal 36, 3-6. 30-31; Lc 14, 25-33.
LECTURA Is 48, 17-19
Lectura del libro de Isaías. Así habla el Señor, tu redentor, el Santo de Israel: Yo soy el Señor, tu Dios, el que te instruye para tu provecho, el que te guía por el camino que debes seguir. ¡Si tú hubieras atendido a mis mandamientos, tu prosperidad sería como un río, y tu justicia, como las olas del mar! Como la arena sería tu descendencia, como los granos de arena, el fruto de tus entrañas; tu nombre no habría sido extirpado ni borrado de mi presencia. Palabra de Dios.
Comentario: Llama la atención este oráculo pesimista del profeta en medio de otros donde expresaba felicidad y dicha. El gran problema es la infidelidad del pueblo y su obstinación en el pecado, que lo llevaba a prescindir de Dios. Su mayor pecado no ha sido quebrantar los mandamientos de la Ley, sino el considerarlos inútiles para su vida. El pueblo buscaba vivir sin ninguna otra Ley que su propio juicio y criterio.
SALMO Sal 1, 1-4. 6
R. ¡El que te sigue, Señor, tendrá la luz de la Vida!
¡Feliz el hombre que no sigue el consejo de los malvados, ni se detiene en el camino de los pecadores, ni se sienta en la reunión de los impíos, sino que se complace en la ley del Señor y la medita de día y de noche! R.
Él es como un árbol plantado al borde de las aguas, que produce fruto a su debido tiempo, y cuyas hojas nunca se marchitan: todo lo que haga le saldrá bien. R.
No sucede así con los malvados: ellos son como paja que se lleva el viento. Porque el Señor cuida el camino de los justos, pero el camino de los malvados termina mal. R.
ALELUIA
Aleluia. El Señor vendrá, salgan a su encuentro; Él es el príncipe de la paz. Aleluia.
EVANGELIO Mt 11, 16-19
Evangelio de nuestro Señor Jesucristo según san Mateo. Jesús dijo a la multitud: ¿Con quién puedo comparar a esta generación? Se parece a esos muchachos que, sentados en la plaza, gritan a los otros: «¡Les tocamos la flauta, y ustedes no bailar on! ¡Entonamos cantos fúnebres, y no lloraron!». Porque llegó Juan el Bautista, que no come ni bebe, y ustedes dicen: «¡Está endemoniado!». Llegó el Hijo del hombre, que come y bebe, y dicen: «Es un glotón y un borracho, amigo de publicanos y pecadores». Pero la Sabiduría ha quedado justificada por sus obras. Palabra del Señor.
Comentario: La parábola toma como referencia al mundo de los niños, a quienes con frecuencia les cuesta ponerse de acuerdo en sus juegos. En ese sentido, el pueblo judío se comporta como los niños, ya que viven renegando de su fe y nunca están conformes. Los que viven renegando de su fe representan a los que no escuchan ni entienden el mensaje del Hijo de Dios. Por eso son comparados con los que no bailan ni lloran al ritmo de la música.