En emotiva celebración, estudiantes de colegios católicos y afines se congregaron en el templo Catedral para confiar al Señor y solicitar su bendición al inicio de año académico 2024.

La Eucaristía, la presidió el arzobispo René Rebolledo Salinas, acompañado por los sacerdotes Oliver Pastén y Bruno Barbosa.

El Pbro. Oliver Pastén, Secretario Ejecutivo de la Vicaría de Educación, destacó: “Quiero recordarles que están llamados a sentirse parte de una Iglesia que camina junto a nosotros, que nos sostiene y guía en nuestro camino educativo. En este nuevo año académico, los invito a abrir sus corazones y permitir que la presencia del Señor llene sus vidas de esperanza, sabiduría y gratitud. Que cada paso que den esté impregnado de la certeza de que no están solos, que el Señor está con ustedes en cada desafío y logro”.

Marcia Ortíz, directora del Colegio Santo Tomás de La Serena, detalló: “Para nosotros es un honor que estudiantes de nuestro colegio puedan caminar junto a Jesús en diferentes experiencias que como colegio brindamos. La participación de ellos en la santa Misa “Bendición de Mochilas” nos honra como colegio ya que es una instancia que podemos hacer comunidad cercarnos al Señor y encomendarnos al inicio de este nuevo año lectivo”.

Por su parte, Edgardo Páez, director del Colegio Sagrados Corazones, resaltó la importancia de cultivar valores religiosos en la formación de los jóvenes, mientras que Alejandro Muñoz, director del Colegio Providencia de La Serena, enfatizó la necesidad de “priorizar la relación con el Señor como fundamento esencial para un año escolar que trae enormes desafíos”.

La santa Eucaristía culminó con la tradicional bendición de las mochilas por parte del Arzobispo, quien además extendió la invitación a todos los presentes a ser partícipes de la primera Jornada Nacional de la Juventud (JNJ) que se llevará a cabo en enero del año 2025.

Esta celebración marca el inicio de un nuevo año escolar lleno de esperanza, fe y compromiso con la educación integral de los jóvenes, guiados por los valores evangélico y y la puesta de Dios Padre, quien guía sus pasos.