El nivel de accesibilidad, el nivel de formación, el nivel de reflexión teológica y el nivel de participación activa en la vida pastoral de la Iglesia. Estos son los cuatro ámbitos de actuación para potenciar la corresponsabilidad de los fieles con discapacidad, propuestos en el documento Alegría sin límites, dado a conocer por el Dicasterio para los Laicos, la Familia y la Vida (DLFV).

El documento es el resultado de una consulta a un grupo de personas con discapacidad de los cinco continentes, representantes de conferencias episcopales y asociaciones internacionales que, en el marco del camino sinodal, debatieron sobre cómo ser cada vez más Iglesia sinodal en misión.

En la presentación, el secretario del Dicasterio, Gleison De Paula Souza, destacó que “para ser la Iglesia de todos, de todos, de todos-como nos ha pedido repetidamente el Santo Padre- es necesario aprender a reconocer que las personas con discapacidad son fieles que comparten con todo cristiano la misma dignidad bautismal y la común vocación a la santidad”.

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