Solemnidad de la Santísima Trinidad
Dios es comunidad: Padre, Hijo y Espíritu Santo
Motivación de entrada
La liturgia de hoy nos invita al silencio, a la reflexión y a la adoración, ante el mayor misterio de nuestra fe: Dios es uno en su naturaleza, y trino en las personas: Padre, Hijo y Espíritu Santo. Dios es familia, crea al hombre, lo ama, lo recoge en su gloria definitiva.
Acto penitencial
Por no haber cultivado nuestra fe con el estudio y la oración. Por no abrirnos al amor del Padre Dios. Por no valorar debidamente la comunidad, signo de la Trinidad.
Colecta
Profesamos nuestra fe en la Trinidad. Toda oración se dirige al Padre por el Hijo, en el Espíritu Santo.
LECTURAS CICLO C
Primera lectura: Proverbios 8, 22-31.
Con lenguaje poético, se describe el rol de la sabiduría junto a Dios en la creación del mundo. Nace espontáneamente el deseo de cuidar la naturaleza como obra amorosa de Dios.
Segunda lectura: Romanos 5, 1-5.
Llamado de Pablo a la fe, a la esperanza que no defrauda, a la alegría en las pruebas, pues nuestra fuerza nace del amor con que Dios nos ha gratificado.
Evangelio: Juan 16, 12-15.
Jesús anuncia que el Espíritu Santo nos revelará la verdad entera sobre él y sobre el Padre.
Oración de los fieles
Presentación de las ofrendas
Ofrecemos en el altar estos dones, que recibimos de su providencia de Padre y que el Espíritu Santo transformará en el cuerpo y en la sangre de Jesús.
Comunión
La comunión con el cuerpo y la sangre de Cristo en el Espíritu Santo, es anticipo y promesa de vida eterna.
Despedida
Dios es comunidad, Dios es familia. La Iglesia es la familia de Dios: la comunión del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. A nosotros, cristianos, nos corresponde el deber de testimoniarlo con la fe y el amor.