Santa Rosa de Lima, v. Patrona de América Latina (F). Blanco.
Prefacio de las santas vírgenes.
Reseña: Nace en Lima (Perú) el 20 de abril del año 1586. Bautizada con el nombre de Isabel, por su belleza comenzaron a llamarla “Rosa”. Desde joven desea entregarse a Dios, pero se siente responsable de colaborar con su familia, que pasaba por un traspié económico. Por ello, se inscribe en la Tercera orden dominicana. Reza en un Oratorio construido en su casa, mientras recibe a los desahuciados de los hospitales en la mejor sala familiar, donde la imagen de Jesús Niño los cura milagrosamente. Fallece a los 31 años, en el 1617. Patrona de América Latina y primera santa reconocida en el Continente.
LECTURA 2Cor 10, 17-11, 2
Lectura de la segunda carta del Apóstol san Pablo a los cristianos de Corinto.
Hermanos: El que se gloría, que se gloríe en el Señor. Porque el que vale no es el que se recomienda a sí mismo, sino aquel a quien Dios recomienda. ¡Ojalá quieran tolerar un poco de locura de mi parte! De hecho, ya me toleran. Yo estoy celoso de ustedes con el celo de Dios, porque los he unido al único esposo, Cristo, para presentarlos a Él como una virgen pura. Palabra de Dios.
Comentario: Pablo está luchando con aquellos que se creen “súper-apóstoles” disfrazados de un ministerio que en realidad no les pertenece. Quien es llamado por Dios, se gloría en el Señor. En cambio, quien se auto-proclama como misionero, centra todo sobre su persona. ¿Fuimos llamados o nos hemos auto-convocado?
SALMO Sal 148, 1-2. 11-14
R. ¡Alaben el Nombre del Señor, jóvenes y vírgenes!
Alaben al Señor desde el cielo, alábenlo en las alturas; alábenlo, todos sus ángeles, alábenlo, todos sus ejércitos. R.
Los reyes de la tierra y todas las naciones, los príncipes y los gobernantes de la tierra; los ancianos, los jóvenes y los niños, alaben el nombre del Señor. R.
Alaben el Nombre del Señor. Porque solo su Nombre es sublime; su majestad está sobre el cielo y la tierra, y Él exalta la fuerza de su pueblo. R.
¡A Él, la alabanza de todos sus fieles, y de Israel, el pueblo de sus amigos! R.
ALELUIA Jn 15, 9. 5
Aleluia. Dice el Señor: “Permanezcan en mi amor; el que permanece en mí, y yo en él, da mucho fruto”. Aleluia.
EVANGELIO Mt 13, 44-46
Evangelio de nuestro Señor Jesucristo según san Mateo.
Jesús dijo a la multitud: “El reino de los cielos se parece a un tesoro escondido en un campo; un hombre lo encuentra, lo vuelve a esconder y, lleno de alegría, vende todo lo que posee y compra el campo. El reino de los cielos se parece también a un negociante que se dedicaba a buscar perlas finas y, al encontrar una de gran valor, fue a vender todo lo que tenía y la compró”. Palabra del Señor.
Comentario: Santa Rosa de Lima vivió estas parábolas que se sintetizan en estos verbos: encontrar, esconder, vender y comprar. Ella encontró a Dios, lo puso (escondió) en el centro de la vida, vendiendo cuanto tenía, para “comprar su lugar” en el Reino de Dios. Una propuesta de santidad posible también para nuestros días.