San Ambrosio, o. y d. (MO). Blanco.
Leccionario Santoral: Éf 3, 8-12; Sal 88, 2-5. 21-22. 25. 27; Jn 10, 11-16. Prefacio de los Pastores
Reseña: Nace en Tréveris, en el año 340, en el seno de una familia romana. Tiene la virtud de llegar a las soluciones de los problemas que se le presentan. Esa buena disposición le otorga gran fama de conciliador y hace que el pueblo solicite su nombramiento como obispo. Es consagrado obispo de Milán, en el año 374, por elección popular. Se destaca en su amor por la comunidad y su gran capacidad de llegar a los corazones por medio de sus sermones. Se dedica al estudio de las Sagradas Escrituras, y es uno de los grandes doctores de la Iglesia.
LECTURA I s40, 25-31
Lectura del libro de Isaías.
Dice el Santo: “¿A quién me van a asemejar, para que yo me iguale a él?”. Levanten los ojos a lo alto y miren: ¿quién creó todos estos astros? El que hace salir a su ejército uno por uno y los llama a todos por su nombre: ¡su vigor es tan grande, tan firme su fuerza, que no falta ni uno solo! ¿Por qué dices, Jacob, y lo repites tú, Israel: “Al Señor se le oculta mi camino y mi derecho pasa desapercibido a mi Dios”? ¿No lo sabes acaso? ¿Nunca lo has escuchado? El Señor es un Dios eterno, Él crea los confines de la tierra; no se fatiga ni se agota, su inteligencia es inescrutable. Él fortalece al que está fatigado y acrecienta la fuerza del que no tiene vigor. Los jóvenes se fatigan y se agotan, los muchachos tropiezan y caen. Pero los que esperan en el Señor renuevan sus fuerzas, despliegan alas como las águilas; corren y no se agotan, avanzan y no se fatigan. Palabra de Dios.
Comentario: El profeta repite sus convicciones sobre la grandeza del Dios de Israel buscando encantarse y entusiasmar al Pueblo que estaba esclavo en Babilonia, donde no tenía Templo ni culto programado, estando tentado a seguir con otros dioses.
SALMO
Sal 102, 1-4. 8. 10
R. ¡Bendice, alma mía, al Señor!
Bendice al Señor, alma mía, que todo mi ser bendiga a su santo Nombre; bendice al Señor, alma mía, y nunca olvides sus beneficios. R.
Él perdona todas tus culpas y sana todas tus dolencias; rescata tu vida del sepulcro, te corona de amor y de ternura. R.
El Señor es bondadoso y compasivo, lento para enojarse y de gran misericordia; no nos trata según nuestros pecados ni nos paga conforme a nuestras culpas. R.
ALELUIA
Aleluia. El Señor viene a salvar a su pueblo. Felices los preparados para salir a su encuentro. Aleluia.
EVANGELIO Mt 11, 28-30
Evangelio de nuestro Señor Jesucristo según san Mateo.
Jesús tomó la palabra y dijo: “Vengan a mí todos los que están afligidos y agobiados, y yo los aliviaré. Carguen sobre ustedes mi yugo y aprendan de mí, porque soy paciente y humilde de corazón, y así encontrarán alivio. Porque mi yugo es suave y mi carga liviana”. Palabra del Señor.
Comentario: Jesús nos revela cómo es el camino que Dios nos propone. No afirma que nos quitará las preocupaciones y/o enfermedades, más bien que nos dará los medios necesarios para que sean más lle- vaderas. ¿Hemos aprendido este camino?