Fruto de la toma de conciencia de la profunda vivencia religiosa y de la riqueza cultural de nuestros pueblos, la Iglesia latinoamericana y caribeña comenzó, desde hace ya alrededor de cincuenta y cinco años, a hacerse consciente de su propia identidad y de su ubicación e importancia dentro de la Iglesia universal. Durante todo este tiempo, ella ha estado diciendo una palabra propia y ha ido trazando, a través de las cinco Conferencias Generales de su Episcopado, un camino pastoral rico y novedoso.
El presente texto emprende una lectura, a la vez, diacrónica y sincrónica de dichas Conferencias. Por una parte, saca a la luz el contexto particular en el que se efectúa cada Conferencia, junto a su misma realización, el documento emanado y los aportes ofrecidos por cada una de ellas. Por otra, hace una lectura de conjunto que permite captar el significado de las Conferencias y su aporte al camino pastoral y al proceso evangelizador trazado por las mismas.