Motivación de entrada
El Bautismo de Jesús, que hoy celebramos en la liturgia, es una hermosa ocasión para renovar nuestras promesas bautismales: la renuncia al pecado y el compromiso de vida cristiana.
Acto penitencial
Por las veces que nuestro bautismo ha quedado relegado a nuestra infancia; por no habernos preocupado de redescubrirlo; por no vivir los compromisos de santidad que conlleva, pedimos perdón.
Colecta
Pedimos al Padre Dios que, por la gracia del bautismo de Jesús, podamos vivir siempre en su amor.
LECTURAS CICLO B
Primera lectura: Isaías 55, 1-11.
El profeta nos recuerda que debemos buscar siempre al Señor. Todos los bautizados estamos llamados a eso. La palabra de Dios nos alimenta y da fruto en nosotros si la acogemos debidamente.
Segunda lectura: 1 Juan 5, 1-9.
La fe recibida, con las aguas del bautismo, es la gran fuerza que vence al mundo.
Evangelio: Marcos 1, 7-11.
El Padre Dios proclama a Jesús como su hijo predilecto. Todo bautizado deberá hacer esta experiencia de Dios.
Oración de los fieles
Presentación de las ofrendas
Con los dones del pan y del vino, presentamos al Señor a los que se preparan al bautismo en nuestra comunidad parroquial y a los recién bautizados.
Comunión
Alimentados con el cuerpo de Cristo, podemos vivir como discípulos de Jesús e hijos de Dios.
Despedida
Como cristianos conscientes de sus compromisos bautismales, vayamos a anunciar la alegría de ser hijos de Dios, hermanos de Jesús y templos del Espíritu Santo.