Cristo vive. Él es nuestra esperanza y la juventud más hermosa de este mundo. Todo lo que toca se hace joven, se hace nuevo, se llena de vida … ¡Él vive y te quiere vivo!. Con esas palabras comienza la Exhortación Apostólica post-sinodal Christus vivit, escrita por el papa Francisco como resultado del Sínodo sobre los jóvenes, la fe y el discernimiento vocacional, que se desarrolló entre el 3 y el 28 de octubre del año 2018.
Durante la presentación del documento, realizada en Roma, el cardenal Lorenzo Baldissieri, Secretario general de la Secretaría General del Sínodo de los Obispos, dijo que la exhortación apostólica “constituirá para el futuro próximo la magna carta de la pastoral juvenil y vocacional en las diversas comunidades eclesiales, todas marcadas, -aunque de diferentes maneras según las diferentes latitudes- por una profunda transformación de la condición juvenil”.
Según el cardenal Baldissieri, con este texto, “el Santo Padre quiere transmitir a los jóvenes y, con ellos a todos nosotros, que Jesucristo no pertenece solo al pasado, sino también al presente y al futuro, porque Él es la Vida eterna”. De este modo, cada generación de creyentes debe ser capaz de descubrir en Cristo a un contemporáneo y a un compañero de viaje.
En tanto, monseñor Fabio Fabene, Subsecretario de la Secretaría General del Sínodo de los Obispos, explicó que el texto firmado por el Papa invita a los jóvenes a ser miembros activos y creativos de la Iglesia, y a contribuir a la misión de proclamar el Evangelio y la belleza de la vida en Cristo a toda la comunidad eclesial. “Emerge en el texto casi una propuesta de alianza que el Santo Padre dirige a los jóvenes: una invitación a colaborar para construir un futuro mejor, en particular con respecto a aquellas áreas identificadas por la Asamblea sinodal como ‘nudos cruciales’ que atraviesan la vida de la Iglesia y la sociedad: el entorno digital, los migrantes, el tema del abuso infantil”, señaló.
“Entre las diversas contribuciones, diseminadas en el texto que los jóvenes pueden ofrecer, -agregó- me gustaría destacar una más: la comunicación a otros jóvenes de la belleza de la experiencia personal del encuentro con Cristo. Enamorados de él y deseosos de testimoniar el Evangelio con sus vidas, están invitados a dar a conocer a Jesús Salvador a todos, incluso a aquellos que parecen estar más alejados e indiferentes, hasta las periferias existenciales extremas”.
Por su parte, el Prefecto del Dicasterio para la Comunicación, Dr. Paolo Ruffini, desarrolló cómo, a través del documento, el Papa motiva a los jóvenes a impulsar una comunicación transparente y verdadera, pidiéndoles que aporten su capacidad para renovar, reclamar, exigir coherencia y testimonio. “Francisco invita a los jóvenes a no estar en el balcón,… a involucrarse, a ensuciarse las manos, a tener fe y a soñar; no para abstraerse de la realidad, sino para cambiarla también a través de su capacidad para comunicarse, para convertirse en líderes populares”.
Christus vivit fue firmada por el Papa en Loreto, el 25 de marzo de 2019, durante la celebración de la solemnidad de la Anunciación del Señor. Está dividida en nueve capítulos en donde se desarrollan 299 puntos, como por ejemplo: una Iglesia joven que se renueva, la heterogeneidad de la juventud, María como referente para los jóvenes, la juventud en un mundo en crisis, los migrantes, los problemas de los jóvenes, los abusos sexuales a los menores, la juventud como momento para el discernimiento de la vocación, la relación entre los jóvenes y los ancianos, la pastoral juvenil, la vocación al matrimonio y la vocación a la vida consagrada.
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