Este miércoles 8 de diciembre, la Arquidiócesis de Santiago celebró desde las 06:00 de la mañana, la Solemnidad de la Inmaculada Concepción desde el cerro san Cristóbal. Diversas misas, oración y confesiones, marcaron la jornada. La eucaristía de mediodía fue celebrada por el Arzobispo de Santiago, Cardenal Celestino Aós, quien llamó a la sociedad a participar de los procesos políticos con convicción y apegados al Evangelio. Además, pidió trabajar por la verdad que libera, construye y renueva corazones para un Chile nuevo.
La misa de mediodía fue celebrada por el cardenal Celestino Aós, quien en su homilía precisó que la verdad solo viene de Jesucristo y no nos condena. “Nos acoge, nos abraza, nos sostiene y nos da el perdón. La verdad que libera, que construye, que renueva los corazones para un Chile nuevo”, soslayó.
Luego, monseñor Aós, sobre la realidad que vive la sociedad chilena, destacó que “cuánta gente cada día demuestra paciencia, cuidándose de no sembrar el pánico, sino corresponsabilidad. Cuántos padres, madres, abuelos y abuelas, docentes, muestran a nuestros niños con gestos pequeños y cotidianos, cómo enfrentar y transitar en una crisis, readaptando rutinas, levantando miradas e impulsando la oración. Es la fe la que le da sentido a cada acontecimiento”.
El obispo no quedó ajeno a la contingencia del país y sostuvo, a la luz de la imagen de San José, que “en nuestras circunstancias se nos pide diálogo y fidelidad (…) importan las leyes, pero importa más que revisemos nuestras propias opciones y nuestras relaciones dentro del matrimonio y la familia para que sean matrimonios y familias cristianas. Jesús vio la ternura de Dios en San José. Necesitamos la ternura, la delicadeza, la cortesía y el respeto”, pidió.
Tras la misa, se bendijo la imagen de San José que la Congregación de los Josefinos de Murialdo regaló a la Arquidiócesis de Santiago, con motivo de la culminación del año en honor al padre adoptivo de Jesús.
La celebración continuó con tres misas celebradas por los obispos auxiliares, a las 15:00 horas, 16:30 y 18:00 horas. Cabe destacar que hasta las 14:00 horas más de mil personas se habían conectado a las transmisiones.
Entre las medidas sanitarias dispuestas, estuvo la exigencia del Pase de Movilidad a todas las personas que ingresaron al santuario, una exhaustiva sanitización entre cada misa, diferenciación de los espacios para peregrinos y asistentes a las eucaristías, como también demarcación de las bancas para el respectivo distanciamiento físico.