Motivación de entrada
Celebramos el último domingo de Cuaresma y la liturgia nos anticipa la resurrección del Señor.
Acto penitencial
Pedimos perdón por todas las veces que hemos sido sordos a la voz del Espíritu Santo y hemos ignorado sus inspiraciones.
Lecturas bíblicas
Primera lectura: Jeremías 31, 31-34.
El profeta anuncia una alianza nueva: Dios escribirá su ley en el corazón del hombre y proclama: “Yo seré su Dios y ellos serán mi pueblo”.
Segunda lectura: Hebreos 5, 7-9.
Obedecer la voluntad de Dios no siempre es fácil. Jesús lo aprendió con súplicas y lágrimas, y así se constituyó en ejemplo para nosotros.
Evangelio: Juan 12, 20-33.
Al acercarse el tiempo de su pasión, Jesús nos recuerda que el grano de trigo debe morir para dar fruto; y aquel que no entrega su vida por Dios y los demás, la pierde.
Oración de los fieles
Presentación de las ofrendas
Ponemos sobre el altar, juntos con el pan y el vino, nuestros sacrificios, compromisos y nuestras esperanzas.
Comunión
La comunión con Jesús es un anticipo de la resurrección definitiva, si comulgamos realmente con su pasión y su muerte.
Despedida
Vayamos a anunciar a todos la buena noticia de Jesús: el que vive y cree en mí no morirá jamás.