En el corazón del calendario litúrgico católico, la Semana Santa reviste un significado profundo y trascendental. Esta conmemoración representa, además, una oportunidad invaluable para educar en valores trascendentales y fortalecer así la formación integral de los estudiantes. Pero ¿cómo abordar pedagógicamente el significado de la Semana Santa en las salas de clases?
Con una mirada experta y sensible, el profesor Hugo Tapia Silva, Dr. en Educación y académico del Departamento de Teología de la Universidad Católica del Maule, desgrana estrategias didácticas, recursos y enfoques para hacer que la Pasión, Muerte y Resurrección de Jesús cobren vida en las aulas, adaptándose a las distintas edades y niveles de madurez de los estudiantes.
— Profesor, ¿qué importancia tiene la Semana Santa en el calendario litúrgico y en la formación de los estudiantes?
Acá hay dos preguntas sumamente importantes. En el caso de la primera, la Semana Santa es “La Gran semana”, en la que los cristianos conmemoramos la Pasión, Muerte y, especialmente, la Resurrección de Jesús porque, recordando a San Pablo, si no creemos que Él resucitó, vana es nuestra fe. Es, por tanto, el recuerdo doloroso de su muerte y la alegría de saber que, así como Él, nosotros también resucitaremos.
En el caso de la segunda pregunta, si pensamos en los estudiantes de Religión en las escuelas, aprender sobre la Semana Santa es aprender sobre lo fundamental de la fe cristiana, descubriendo en ella, entre muchas otras cosas, la gratuidad del amor hacia los demás, el sentido de la vida cristiana, el valor de la esperanza, la alegría del compartir o la cultura de la sociedad en que vivía Jesús.
— ¿Qué estrategias didácticas considera más efectivas para abordar la Semana Santa en la sala de clase?
Las estrategias dependerán de lo que quiero que aprendan sobre la Semana Santa; luego, corresponde diseñar los procesos considerando quiénes son nuestros estudiantes, conociendo y respetando su estadio vital, creencias, experiencias religiosas o conocimientos previos. En general, pensando en estudiantes de educación media, las estrategias pueden partir de sus experiencias: ¿qué hacen o ven que hacen sus familiares? ¿Aparece algo sobre Semana Santa en redes sociales? O pasando a pensar en situaciones más personales: ¿Has tenido alguna experiencia que ha hecho tu vida mejor o ha cambiado tu vida? A partir de ello, invitar a los estudiantes a crear diferentes productos que les permitan evidenciar su reflexión o aprendizajes.
Ya como actividades concretas, se pueden generar líneas de tiempo de la Semana Santa, relatos alternativos de personajes cercanos a Jesús que cuenten lo que están viviendo esa semana, reflexiones sobre su propia experiencia religiosa, “noticieros” que den cuenta de lo ocurrido esa semana, análisis de detalles en los textos bíblicos, creación de micro relatos o mini representaciones, entre otras.
— ¿Cómo adaptar el contenido a las diferentes edades y niveles de madurez de los estudiantes?
La Semana Santa nos recuerda un momento violento en la vida de una persona. Por ello, hay que ser cuidadoso con la forma en que se abordan los temas. En niños pequeños, el énfasis puede estar en la alegría del recibimiento de Jesús en Jerusalén o en su resurrección. En el caso de los mayores, abordar la muerte de Jesús como un acto de injusticia y, cómo desde ella, surge la vida, o como una experiencia propia de la humanidad como es la muerte de la que surge la esperanza.
— ¿Qué recursos didácticos recomendaría para complementar la enseñanza de la Semana Santa?
Hay muchos recursos que se pueden utilizar y que dependen del nivel escolar y los objetivos de aprendizaje o los indicadores que han definido. En especial, el cine es una herramienta que entrega la posibilidad de acercarse a la experiencia de la Semana Santa. Así como existen clásicos como Jesús de Nazareth de Zeffirelli, destaco “La Resurrección de Cristo”, del año 2016, que cuenta la experiencia de un centurión romano que es enviado a investigar lo que ocurrió un domingo por la mañana en una tumba que aparece vacía, a pesar de tener guardias en su entrada. Es una película sobre cómo el dolor y la incredulidad de los apóstoles se van convirtiendo en esperanza y la fe. Por supuesto, la película no solo debe ser vista, sino que debe ser analizada con ayuda de una guía y una conversación interesante. Si no alcanza el tiempo para ver la película completa, y sin hacer spoiler, se puede presentar la escena de un encuentro de Jesús con los discípulos.
Además del uso del cine, se pueden utilizar recursos que permitan comprender diversas cuestiones: un mapa, para conocer el lugar en que ocurrió; un calendario para saber por qué la Semana Santa cambia cada año de fechas; pan para explicar qué ocurrió y cuál es el sentido de la Última Cena; ramos de olivo para comentar el ingreso de Jesús en Jerusalén; una línea de tiempo con textos bíblicos para conocer la cronología de la Semana Santa; teatralizar algún momento; utilizar un teléfono para que los estudiantes entrevisten en sus casas a familiares sobre cómo viven la Semana Santa; entre otros.
— ¿Qué valores cristianos se pueden trabajar a partir de la Semana Santa?
La Semana Santa nos brinda la posibilidad de reflexionar sobre Jesús y su mensaje, a partir de las palabras y situaciones que vivió Jesús y sus cercanos. Entre algunos de los valores que se pueden trabajar se encuentran la gratitud, que surge de la entrega generosa de Jesús. La amistad, reflejada en el apóstol Juan al pie de la cruz, así como la importancia de la familia, presente en la compañía permanente de María. La humildad, en un Jesús que entra a lomo de un burro en Jerusalén. El perdón de Jesús hacia quienes lo asesinaron, y la reconciliación de Pedro, quien lo negó tres veces o la alegría cristiana de ser amado por Dios.
— Finalmente, ¿qué consejos le daría a los profesores que se enfrentan por primera vez a la enseñanza de la Semana Santa?
Es difícil dar consejos, pues todos los contextos son particulares y presentan dificultades y aspectos favorables que inciden en la práctica y en la toma de decisiones en el aula. Pero si algo se puede decir, es que creo que hay dos cosas que son relevantes: recordar que la experiencia religiosa de los estudiantes no es la misma experiencia religiosa que posee la o el profesor, y por tanto, la Semana Santa posee significados diversos en el aula. Ser consciente de esto es fundamental para elegir las mejores estrategias de enseñanza y aprendizaje. Lo segundo, no olvidar la centralidad del mensaje de Misericordia de Jesús y la Esperanza que nace en la mañana del Domingo Santo.