Muy queridos hermanos:
Con gozo celebramos hoy la fiesta litúrgica de nuestro fundador, el beato Santiago Alberione. Esta fecha asume un significado especial en el presente año, porque damos comienzo al Año Bíblico de Familia Paulina que durará hasta el 26 de noviembre de 2021.
Recordamos que el Año Bíblico cae especialmente en concomitancia con la conmemoración del nacimiento para el cielo de dos grandes amantes de la Palabra de Dios, que son una referencia importante para nosotros “apóstoles de la comunicación”: los 1600 años de la muerte de san Jerónimo (30 de septiembre de 420) y el cincuentenario del fallecimiento del beato Santiago Alberione (26 de noviembre de 1971), que celebraremos el próximo año.
Hoy somos nosotros los llamados a amar y orar la Palabra, a vivirla y anunciarla tras el ejemplo de estas dos grandes figuras de la Iglesia. El tema del Año Bíblico, “Para que la Palabra del Señor siga avanzando” (2Tes 3,1), constituye un verdadero reto especialmente si consideramos los tiempos difíciles en que vivimos a causa de la pandemia.
Ciertamente todas nuestras Circuncripciones, en sinodalidad con la Familia Paulina presente en el territorio, ya han hecho su programación. En esta perspectiva, la Palabra sea la luz de nuestro camino, según la óptica del carisma paulino, es decir en comunión con la Iglesia y con el mundo en su realidad concreta, con todas las personas, utilizando todos los lenguajes que el hombre de hoy usa y comprende.
De modo particular, en esta celebración de la fiesta del beato Santiago Alberione recordamos a los miembros de la Familia Paulina y a tantas otras personas esparcidas por el mundo que han sido víctimas del Covid-19, como también recordamos a los contagiados que aguardan la curación.
A todos deseo una buena fiesta del beato Alberione y un Año Bíblico con mucho fruto. ¡La gracia y la paz de Jesús Maestro, Camino, Verdad y Vida –la Palabra hecha carne– esté siempre con vosotros!
Roma, 26 de noviembre de 2020
Fraternalmente,
Valdir José De Castro, Superior general.