A templo lleno se celebró la Solemnidad de la Virgen del Carmen en el Santuario Nacional de Maipú. Fe, devoción y alegría, marcaron la pauta en un nuevo festejo a la Patrona de Chile. Monseñor Celestino Aós, presidió la misa principal de las 12:00 horas.
“Para mí, la Virgen del Carmen representa amor más que nada. Representa protección y es la persona que me guía y me dice cómo actuar en la vida. Me ayuda a ser amable, a no juzgar a nadie y siento que es la conexión que tengo con Dios”, dijo Alexandra Pavez. Junto a ella, fueron cientos de personas, las que llegaron hasta el Santuario Nacional de Maipú para agradecer a la Virgen del Carmen su intercesión ante dificultades o acontecimientos claves en sus vidas.
El obispo de Santiago, en su homilía encomendó a la Patrona de Chile la vida de nuestro país: “Virgen del Carmen, te pedimos sabiduría para construir un Chile mejor y para construir una patria más fraterna para todos, necesitamos comenzar por el respeto. Respetarnos más unos a otros. Descartar de nuestras conversaciones, en nuestras familias y en nuestros medios de comunicación, el insulto, la mentira, la calumnia, para que podamos entablar el diálogo y la colaboración”. Luego añadió: “Virgen del Carmen, ayúdanos a pedir sinceramente a Dios la justicia. Sólo en el cielo, en la verdad plena, obtendremos la justicia plena, pero aquí, debemos buscar la mayor verdad para construir la mejor justicia”.
La celebración, continuó con danzas, cantos y muestras de devoción popular, como un gran gesto de agradecimiento y devoción a la que es la “Reina y Madre de Chile“.