Sagrado Corazón de Jesús (S). Blanco.
Gloria. Credo. Prefacio propio.
El amor de Dios entre nosotros
Hoy celebramos la solemnidad del Sagrado Corazón de Jesús que fuera impulsada principalmente por el francés san Juan Eudes (1601-1680) y sus fundaciones.
Muchas veces encontramos dibujados en las paredes de las plazas dos corazones unidos y el nombre de un varón y de una mujer, expresando un deseo o una realidad alcanzada. El corazón simboliza el centro de la persona, en el cual confluyen todas las emociones, los sentimientos y donde se elaboran las relaciones con el prójimo, con el Creador y la creación.
Y si el corazón de los humanos puede llegar a tanto, ¡cuánto más el corazón del Hijo de Dios! Durante su vida Jesús se manifestó como el Buen Pastor (Cfr. Jn 10, 11-18) que busca a las ovejas perdidas y manifiesta su alegría al encontrarlas. Un pastor que se conmueve frente a la madre que ha perdido a su único hijo y que llora ante la muerte de su amigo Lázaro.
Jesús es la mejor manifestación del amor de Dios por nosotros. Y desde su corazón que ama podemos aprender a ser más compasivos, amando a todos y no sólo por la piel.
Que esta celebración, muy querida y enraizada en nuestro pueblo, nos motive a tener un corazón siempre más semejante al suyo.
Dios les bendiga,
P. Martín Dolzani, ssp.
MOTIVACIÓN DE ENTRADA
Guía: Esta celebración del Sagrado Corazón de Jesús nos motiva a considerar el infinito amor de Dios, revelado en Cristo. Un amor tan cercano y visible que nos reclama una respuesta generosa e incondicional.
1ª LECTURA Os 11, 1. 3-4. 8-9
Guía: Hablando del Pueblo de Israel, el Profeta nos muestra cómo Dios nos ama desde antes que vengamos a esta vida.
Lectura de la profecía de Oseas.
Así habla el Señor: Cuando Israel era niño, Yo lo amé, y de Egipto llamé a mi hijo. ¡Y Yo había enseñado a caminar a Efraím, lo tomaba por los brazos! Pero ellos no reconocieron que Yo los cuidaba. Yo los atraía con lazos humanos, con ataduras de amor; era para ellos como los que alzan a una criatura contra sus mejillas, me inclinaba hacia él y le daba de comer. Mi corazón se subleva contra mí y se enciende toda mi ternura: no daré libre curso al ardor de mi ira, no destruiré otra vez a Efraím. Porque Yo soy Dios, no un hombre: soy el Santo en medio de ti, y no vendré con furor. Palabra de Dios.
SALMO [Sal] Is 12, 2-3. 4-6
R. Sacarán agua con alegría de las fuentes de la salvación.
Éste es el Dios de mi salvación: yo tengo confianza y no temo, porque el Señor es mi fuerza y mi protección; Él fue mi salvación. R.
Ustedes sacarán agua con alegría de las fuentes de la salvación. Den gracias al Señor, invoquen su Nombre, anuncien entre los pueblos sus proezas, proclamen qué sublime es su Nombre. R.
Canten al Señor porque ha hecho algo grandioso: ¡que sea conocido en toda la tierra! ¡Aclama y grita de alegría, habitante de Sión, porque es grande en medio de ti el Santo de Israel! R.
2ª LECTURA Éf 3, 8-12. 14-19
Guía: San Pablo, que había sido formado como fariseo aferrado a la Ley, nos muestra cómo su vida cambió desde que conoció el amor de Dios en Jesucristo.
Lectura de la carta del Apóstol san Pablo a los cristianos de Éfeso.
Hermanos: Yo, el menor de todos los santos, he recibido la gracia de anunciar a los paganos la insondable riqueza de Cristo, y manifestar a todos la dispensación del misterio que estaba oculto desde siempre en Dios, el creador de todas las cosas, para que los Principados y las Potestades celestiales conozcan la infinita variedad de la sabiduría de Dios por medio de la Iglesia. Éste es el designio que Dios concibió desde toda la eternidad en Cristo Jesús, nuestro Señor, por quien nos atrevemos a acercarnos a Dios con toda confianza, mediante la fe en Él. Por eso doblo mis rodillas delante del Padre, de quien procede toda paternidad en el cielo y en la tierra. Que Él se digne fortificarlos por medio de su Espíritu, conforme a la riqueza de su gloria, para que crezca en ustedes el hombre interior. Que Cristo habite en sus corazones por la fe, y sean arraigados y edificados en el amor. Así podrán comprender, con todos los santos, cuál es la anchura y la longitud, la altura y la profundidad, en una palabra, ustedes podrán conocer el amor de Cristo, que supera todo conocimiento, para ser colmados por la plenitud de Dios. Palabra de Dios.
ALELUIA Mt 11, 29
Aleluia. Dios nos amó primero, y envió a su Hijo como víctima propiciatoria por nuestros pecados. Aleluia.
EVANGELIO Jn 19, 31-37
Guía: Escuchemos el amor extremo de Jesús por nosotros, a tal punto, que una vez muerto de su costado emanó “sangre y agua”, símbolos de la eucaristía y del bautismo.
Evangelio de nuestro Señor Jesucristo según san Juan.
Era el día de la Preparación de la Pascua. Los judíos pidieron a Pilato que hiciera quebrar las piernas de los crucificados y mandara retirar sus cuerpos, para que no quedaran en la cruz durante el sábado, porque ese sábado era muy solemne. Los soldados fueron y quebraron las piernas a los dos que habían sido crucificados con Jesús. Cuando llegaron a Él, al ver que ya estaba muerto, no le quebraron las piernas, sino que uno de los soldados le atravesó el costado con la lanza, y en seguida brotó sangre y agua. El que vio esto lo atestigua: su testimonio es verdadero y él sabe que dice la verdad, para que también ustedes crean. Esto sucedió para que se cumpliera la Escritura que dice: «No le quebrarán ninguno de sus huesos». Y otro pasaje de la Escritura, dice: «Verán al que ellos mismos traspasaron». Palabra del Señor.
PRESENTACIÓN DE LAS OFRENDAS
Guía: Presentamos los dones del pan y del vino con los mismos sentimientos de Cristo, pidiendo que seamos bendecidos por el pan del amor, en nuestros hogares y ambientes en que nos movemos.
PREPARACIÓN PARA LA COMUNIÓN
Guía: Comulgando con Jesús eucaristía, y con sus sentimientos, podemos amar más y mejor a nuestros hermanos.
DESPEDIDA
Guía: De la celebración del Sagrado Corazón nace el compromiso de aprender de él cómo debemos amarnos entre nosotros y de hacer creíble la fe que profesamos.