Hablar de dicipulado implica hablar de María, pues ella es Madre de la Iglesia y la perfecta discípula de Jesús.
El autor se centra en el tema del discipulado, pero desde la figura de María, para lo cual se pone a la escucha de los pasajes del Nuevo Testamento que hablan de ella y de su papel en la historia de la Salvación.
Estos textos comprenden el llamado de María por parte de Dios, su camino con Jesús, su relación con Él en su niñez y durante su vida pública, y su relación con los discípulos, aspectos que permiten configurar las características esenciales del discipulado de la Madre de Dios, y responder algunas preguntas fundamentales: ¿Se puede aplicar con propiedad a la Madre de Jesús el título de discípula? ¿Se descubren en ella los elementos que identifican a los discípulos del Señor? ¿En qué sentido se le puede considerar la primera y perfecta discípula?.