Roma, 26 de noviembre de 2021
Queridos hermanos:
La celebración de hoy, en el quincuagésimo año del nacimiento para el cielo del beato Santiago Alberione –en concomitancia con la clausura del Año Bíblico de la Familia Paulina– es una ocasión propicia para renovar nuestro compromiso de vivir y anunciar el Evangelio en la fidelidad creativa al carisma paulino en la actual cultura de la comunicación.
Los desafíos de nuestro tiempo son muchos, principalmente debido a las consecuencias de la pandemia del Covid-19; pero no podemos detenernos. Suenan muy oportunas las palabras del beato Alberione, cuando dice: “No os perdáis de ánimo; conservad siempre un sano optimismo. La historia es maestra de la vida, y nuestras pasadas experiencias nos sirven de escuela cara al futuro. Perdida una batalla, mientras vivamos, hay tiempo para ganar otra” (CISP 1088).
Vayamos adelante con fe y esperanza, uniendo las fuerzas, valorando “los dones diferentes, según la gracia que se nos ha dado” (Rom 12,6). Ciertamente la colaboración de cada uno caminando en comunión y en sinergia, para llegar a todos con el Evangelio,
es uno de los testimonios “proféticos” más hermosos que podemos dar al mundo como personas consagradas que tienen por carisma la comunicación.
María, Reina de los Apóstoles y san Pablo apóstol estén siempre junto a cada uno de nosotros, ayudándonos a caminar en el seguimiento de Jesús Maestro, Camino, Verdad y Vida –especialmente en esta fase de preparación a nuestro XI Capítulo general– como lo estuvieron siempre junto a nuestro Fundador.
¡Buena fiesta a todos!
Fraternamente,
P. Valdir José De Castro
Superior general