«El Papa nunca ha querido ofender ni expresarse en términos homófobos, y dirige sus disculpas a quienes se han sentido ofendidos por el uso de un término, divulgado por otros».
Es lo que afirma en una comunicación a los periodistas el director de la Oficina de Prensa de la Santa Sede, Matteo Bruni, tras los artículos publicados en las últimas horas que atribuyen al Pontífice el uso de una palabra sobre el tema del ingreso de homosexuales en el seminario. Se trata de un pasaje del diálogo a puerta cerrada que el Pontífice mantuvo el 20 de mayo con los obispos de la Conferencia Episcopal Italiana en el Aula Pablo VI, del que se hicieron eco los medios de comunicación.
«El Papa Francisco está al corriente de los artículos que han salido recientemente sobre una conversación, a puerta cerrada, con los obispos de la CEI», se lee en la nota de Bruni, en la que -además de la aclaración y la disculpa- recuerdan las palabras tantas veces afirmadas por el Papa: «En la Iglesia hay sitio para todos, ¡para todos! Nadie es inútil, nadie es superfluo, hay sitio para todos. Tal como somos, todos».