Con el inicio de la Cuaresma comenzó la campaña que impulsa la iglesia Católica bajo el lema Chile tiende la mano a las familias vulnerables, iniciativa que busca recaudar fondos para apoyar a los grupos familiares más afectados por la crisis humanitaria generada producto de la pandemia.
“A diferencia de otros ciclos, este periodo no centra la mirada en un solo sujeto prioritario, sino más bien incorpora a diferentes grupos en condición de vulnerabilidad ante la actual crisis social, económica y sanitaria a causa del COVID-19 como lo son niños niñas y adolescentes, mujeres, personas con capacidades diferentes, migrantes, adultos mayores, pueblos originarios entre otros”, explicó el secretario Ejecutivo de Cuaresma de fraternidad, José Tomás Silva.
Por su parte, el presidente de Cuaresma, el obispo Moisés Atisha, hizo el siguiente llamado: “Tenemos una enorme responsabilidad de vencer la indiferencia, lo que es posible cuando de nuestro corazón sale el bien y es capaz de estar al lado de los que más nos necesitan. Por ello, les invito a que hagamos el bien participando de la Cuaresma y apoyando a las familias más vulnerables de nuestra Patria”.
Este año, la campaña de Cuaresma se extiende hasta el 10 de abril, Domingo de Ramos. El equipo de Cuaresma de Fraternidad invita a que durante este tiempo de preparación para la Pasión, Muerte y Resurrección de Jesús realicemos actos concretos de solidaridad, aportando en las alcancías físicas distribuidas en todas las diócesis del país o en la alcancía digital que se encuentra en el sitio web http://www.cuaresmadefraternidad.cl/ y de esta manera hacer posible un mejor cambio en las condiciones de vida de las diversa familias vulnerables que existen en nuestro país.